En un notable despliegue de eficiencia y dedicación, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) activó rápidamente su programa de Asistencia Directa para Vivienda para ayudar a los sobrevivientes del huracán Idalia. A partir del 23 de enero, FEMA había colocado a todas las familias elegibles afectadas por el huracán Idalia en unidades de vivienda provisional, marcando la finalización exitosa del proceso para obtener el “permiso de entrada.”
FEMA ha estado trabajando diligentemente para ubicar a los sobrevivientes elegibles y se esfuerza por instalarlos en unidades de vivienda adecuadas lo más rápido posible. “Nuestro equipo de Asistencia Directa para Vivienda ha estado trabajando incansablemente para lograr una de las misiones de asistencia directa para vivienda más rápidas,” afirmó el coordinador federal de FEMA Brett Howard.
En un plazo excepcional de 40 días desde la aprobación del programa, FEMA colocó al primer sobreviviente en una unidad de vivienda provisional. A muchos hogares elegibles se les ha instalado una unidad de vivienda provisional en su propiedad privada y se han alquilado varias plataformas en parques comerciales para colocar unidades de FEMA.
El programa de Asistencia Directa para Vivienda es un componente importante de la estrategia de respuesta a desastres de FEMA, proporcionando soluciones de vivienda provisional seguras y protegidas a los sobrevivientes elegibles de desastres mientras navegan su proceso de recuperación. Después del huracán Idalia, FEMA aprobó la Asistencia Directa de Vivienda Provisional en nueve condados: Dixie, Gilchrist, Hamilton, Jefferson, Lafayette, Levy, Madison, Suwannee y Taylor, el 18 de septiembre de 2023.
Los ocupantes pueden ser elegibles para permanecer en los remolques de viaje o casas rodantes provistos por FEMA por hasta 18 meses a partir de la fecha de la declaración de desastre mientras buscan opciones de vivienda permanente. Tres hogares ya se han mudado de las unidades de vivienda provisional de FEMA después de completar sus Planes de Vivienda Permanente.
Ubicar a los sobrevivientes en las unidades implica complejidades como pedidos, instalación, permisos, conexión de servicios públicos e inspección. Para garantizar que este proceso se desarrolle sin problemas, FEMA trabaja con los solicitantes, los gobiernos locales, las empresas de servicios públicos y otros, para superar las barreras que pueden impedir que las unidades estén listas para ser ocupadas. La agencia continúa optimizando el proceso para garantizar que los hogares afectados reciban el apoyo que necesitan de manera oportuna.
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